La relación entre los hermanos es siempre muy poderosa e influyente en el caminar de los seres humanos. Esa relación de complicidad que se cultiva de la más tierna infancia entre dos, o más, personas que comparten la vida, define, en muchos casos, la forma como encararemos nuestra vida misma. En la música en general, y en el jazz en particular, la mayoría de las veces sucede que a pesar de tener una misma formación, una misma educación, un ambiente común, etc, uno de los hermanos trasciende más que los otros. En otros casos, los menos, ambos caminos tienen una trascendencia equilibrada, relativamente igual. Hablo de trascendencia, pero también podría usar la palabra éxito.
Esta sesión, que ya la compartí hace algunos años atrás, la vuelvo a poner sobre el tapete para que quienes no lo pudieron hacer, escuchen la magia que se crea cuando los hermanos usan el lenguaje de la música par transmitir sensaciones.
Something Different – The Mangione Brothers Sextet
If I Should Lose You – The Montgomery Brothers
Move To The Groove – The Heath Brothers
Swinging´At The Haven – Marsalis Family
Olvidar – Mike Metheny
Maninha – Tom Jobim/Chico Buarque/Miucha Buarque
Heyoke – The Brubeck Brothers Quartet
Autumn Leaves – Michel Petrucciani/Louis Petrucciani
Two Brothers – Cannoball Adderley/Nat Adderley
On Fire – Katia Labeque/Marielle Labeque
Keepin’ Up With The Joneses – The Jones Brothers
De Manha – Maria Bethania/Caetano Veloso
Hip Bop – Victor Wooten/Reggie Wooten/Joseph Wooten
El mes de marzo acarrea sobre sus espaldas un enero y un febrero que han sido muy lluviosos, aquí en La Paz, en varias ciudades de Bolivia y también en varios países del mundo. El cambio climático cada vez nos envía señales de que algo se está haciendo mal y debemos tomar consciencia de ello y cambiar muchos de los malos hábitos que se tienen.
Este es el motivo por el que decidí que el programa de hoy tenga como eje central a “la naturaleza y el medio ambiente” y para ello recurriré obviamente a algunos temas del mundo del jazz y la Bossa Nova relacionados a esta temática. Y si hablamos de naturaleza y medio ambiente y estamos en el mes de marzo, es fundamental darle un lugar preponderante en el programa a uno de los himnos de la Bossa Nova compuesto por el maestro soberano Antonio Carlos Jobim. Aguas de Marzo.
Las canciones son enamoramientos comprimidos en versos y acordes, son declaraciones de buenas intenciones, son promesas verdaderas, son proyectos de vida, son rendiciones sin más condición que la de ser esclavo hasta el fin de los tiempos, son esperanzas hechas cuerpo, son todo lo que importa y que sólo conocemos al perderlo. Aguas de Marzo, la canción compuesta por Tom Jobim, está considerada por muchos como la mejor canción brasileña de todos los tiempos. Una canción que nos habla de la vida, de las cosas buenas y de las no tanto, de las alegrías y de las penas, de las cosas bellas y de las rotas. Es una síntesis de lo que significa el fin de una estación del año. Nos habla de la selva, con sus maderas raras y sus animales, de la fiesta de la cosecha, de la ciudad y sus coches. Y en el fondo es un canto a no rendirse a amar pase lo que pase, a seguir caminando porque si llueve ya escampará, es la promesa de que si se acaba el verano, este ya volverá.
La música del Brasil –el samba, la bossa nova, el choro, la MPB y otras- siempre ha ejercido una importante influencia en los músicos de jazz convirtiéndose en una fundamental fuente de inspiración para la interpretación de temas clásicos, como también de nuevas composiciones. En este programa escucharemos a grandes maestros del jazz en interpretaciones de temas del gran Antonio Carlos Jobim y también de músicos de la generación posterior como Chico Buarque, Egberto Gismonti, Ivan Lins, Milton Nascimento, Caetano Veloso y Djavan.
Durante todo este mes de septiembre la quinta disminuida tuvo como eje central de sus programas a una de las músicas más hermosas, más dulces y más melódicas que surgió hace exactamente sesenta años, la Bossa Nova.
Fue en el año 1958. Brasil conquistaba por primera vez el título mundial de fútbol, Juscelino Kubitschek de Oliveira proyectaba Brasilia con las aristas y las curvas modernas de Oscar Niemeyer y João Gilberto tocaba la guitarra de una manera que nunca antes nadie lo había hecho, completamente diferente al del samba tradicional. Hoy, João Gilberto es el único miembro vivo de lo que se conoce como la santísima trinidad de la Bossa Nova que formaba junto al poeta Vinicius de Moraes y al pianista y compositor Antonio Carlos Jobim. Fue en abril de ese año que el guitarrista entró al estudio para grabar “Cançao do amor demais” disco de la cantante Elizeth Cardoso, donde el primer corte de ese álbum, Chega de Saudade, fue el manantial del género que se convirtió en poco tiempo en el mejor legado musical del Brasil al mundo entero, y como no podía ser de otra manera, tenía la característica que engrandece al arte, era una música de mezclas. “Cançao do amor demais” no era un disco estrictamente de Bossa Nova, pero si fue el detonante de lo que vendría inmediatamente después, ya que el año siguiente João Gilberto volvería al estudio, esta vez para un álbum propio, el primero, grabando el que sería el disco “Chega de Saudade” donde el maestro ya no solamente tocaba la guitarra sino que cantaba. No. En realidad no cantaba, susurraba. La armonía de Jobim, la poesía de Vinicius y el dulce susurro de Gilberto que se empastaba con su nueva “batida” de la guitarra, eran los ingredientes perfectos para esa nueva música que se conocería como Bossa Nova.
En el programa de hoy, vamos a escuchar los temas y los intérpretes más representativos de la Bossa Nova. Esto lo hago a manera de que preparemos el oído con los temas de la Bossa en sí. El próximo programa retrocederemos un paso escuchando cuales fueron las semillas para que se produzca el nacimiento de la Bossa, es decir escucharemos a lo que podemos llamar “los precursores”: Dick Farney, Lucio Alves, Dolores Duran, Sylvia Telles, Maysa, Johny Alf, João Donato, Garoto, etc. En cambio en esta sesión escucharemos a “los creadores”, que están divididos, cronológicamente, en dos generaciones. En la primera están Tom Jobim, Vinicius de Moraes, Carlos Lyra, Ronaldo Bôscoli y João Gilberto. En la segunda tenemos a Baden Powell, Roberto Menescal y Nara Leão fundamentalmente. Y también hoy escucharemos a “los descendientes” que serían Toquinho, Chico Buarque, Caetano Veloso, Djavan, Ivan Lins, Leila Pinheiro, Wanda Sá, entre tantos otros.
Insensatez – Antonio Carlos Jobim
Samba em Preludio – Vinicius de Moraes/Odette Lara
Muchas veces escucho a algunas personas comentar que el jazz es una música difícil de escuchar, es muy sofisticada, muy compleja y hasta manifiestan que es muy pesada. Seguro que en algunos casos tienen razón, depende de lo que escuchen y cuan habituados están a escuchar jazz. Hace poco tiempo se publicó un hermoso libro titulado cómo escuchar jazz escrito magistralmente por Ted Gioia que es uno de los mayores conocedores de la historia del jazz. El libro es un breve manual, pero útil y ameno, en el que Gioia recorre la historia de este género a través de sus autores, temas, sesiones de grabación y principales hitos. Una obra recomendable para quienes se acercan al jazz por primera vez, pero también para los que ya disfrutan de este género musical. Un próximo programa compartiré con ustedes varios capítulos de ese libro, pero para este, y a manera de preparación, hoy quiero contarles mi experiencia personal de cómo descubrí y me zambullí en las aguas del jazz. Para ello utilizaré algunas reseñas de ese libro, pero por sobre todo…me confesaré con ustedes de cuál fue mi camino hacia el jazz.
Desde mi punto de vista, es muy difícil entrar al jazz directamente. ¿A qué me refiero con directamente? A querer escuchar “de golpe” a Charlie Parker, Thelonious Monk, Miles Davis o cualquiera de los grandes maestros del jazz. Llegar a las orillas del jazz debe ser un proceso natural, pero dialéctico. Haciendo una analogía con las matemáticas, si uno quiere calcular la raíz cuadrada de un número primero deberá saber multiplicar y antes de ello saber sumar, y no es que una cosa sea más importante que la otra, todas son importantes entenderlas, y en la música disfrutarlas.
This Masquerade – George Benson
Mediterranean Sundance – Al Di Meola/Paco De Lucia
Vision is a Naked Sword – The Mahavishnu Orchestra
I Declare – Milton Buckner
A Child Is Born – Richard Davis
Falling Alice – Chick Corea
Bass Face – Bill Evans
I´ll Never See Your Smile Again – Bob James/Earl Klugh
Hace 45 años, Antonio Carlos Jobim se sentó en un banco de su finca carioca frente al río Preto y comenzó a escribir la canción “Aguas de marzo” que, según Frank Sinatra, en la versión del disco Elis & Tom, es “lo más cercano a la perfección”. Lo es. Es una de las más hermosas catedrales de la bossa nova y la canción que refleja el intento de Jobim de una nueva vida. Ya había conquistado los Estados Unidos con la versión en inglés de la “Garota de Ipanema” y llevaba una vida bohemia que no podía controlar. Los médicos le habían aconsejado que de una vez la parara. Tom, como le llamaban los amigos, había decidido dejar de fumar y de tomar. Tenía 45 años y aspiraba a reinventarse con una nueva casa y un retiro espiritual en las afueras de su adorado Río.
La letra de “Aguas de Marzo” habla de eso, de la construcción, del “proyecto de una casa”: “el palo, la piedra, el fin del camino” pero también “la noche, la muerte”, el aparente contraste de “es un ave en el cielo, es un ave en la tierra / es arroyo y es fuente y un poquito de pan / es el fondo del pozo, el final del camino / y en el rostro la sombra de la soledad”. En esos momentos, año 1971 más o menos, Tom Jobim atravesaba una crisis existencial y se sentía muy solo. Las “aguas de marzo cerrando el verano” eran la metáfora de una ilusión, la esperanza de una etapa diferente, un plan.
Este programa girará alrededor de las “Aguas de Marzo” y la cercanía y compromiso de Antonio Carlos Jobim con el medio ambiente y la naturaleza.
Aguas de Marzo – Tom Jobim/Elis Regina
Aguas de Marzo – Joanne Brackeen
Aguas de Marzo – Stan Getz/Joao Gilberto/Miucha
Aguas de Marzo – Stacey Kent
Matita Pere – Tom Jobim
Nuvens Douradas – Cama de Gato
Chovendo Na Roseira – Gal Costa
Boto – Tom Jobim
Correnteza – Joyce/Toninho Horta
Saudade Do Brasil – Bill Evans
Passarim – Tom Jobim
Dindi – Flora Purim
Luiza – Tom Jobim/Edu Lobo
Estrada Do Sol – Nara Leao
Gabriela – Tom Jobim
Borzeguin – Mario Adnet
Pato Preto – Tom Jobim
Sabia – Tom Jobim/Chico Buarque
Forever Green – Tom Jobim
Aguas De Marzo – Tom Jobim/Chico Buarque/Caetano Veloso
No me canso de decir que Antonio Carlos Jobim fue el compositor más importante que haya dado la música de Brasil y uno de los más grandes de la música popular del siglo XX, un compositor de la talla de Cole Porter o George Gershwin.
Tom Jobim, como lo llamaban sus amigos, calculaba haber escrito cerca de quinientas composiciones entre canciones, piezas instrumentales y tonadas. Sin lugar a dudas que es el más importante conjunto de composiciones producido en la música popular brasileña, él fue para la música popular lo que Villalobos para la erudita. Jobim estableció un modelo armónico en la Bossa Nova, que se amalgamó perfectamente con el ritmo de la “batida” de Joao Gilberto dando lugar a los temas más clásicos del género. Internacionalizó la canción brasileña y permitió que esta pasase a formar parte de la historia del jazz. Al contrario de uno de sus maestros de la música popular, como lo fue Caymi, Tom oyó a los maestros impresionistas antes de conocer la música de Gershwin y los standards del jazz, que fueron decantándose hasta llegar a ser un componente discreto pero fundamental. Sin lugar a dudas, uno de sus grandes méritos como compositor, fue el de trazar el aparentemente extraño camino que va de Dorival Caymmi a Claude Debussy, de Ary Barroso a Bach, de la intuición a la deconstrucción.
Tema Jazz – Antonio Carlos Jobim
Lamento – Antonio Carlos Jobim
Wave – Antonio Carlos Jobim
Triste – Antonio Carlos Jobim
God And The Devil in The Land of The Sun – Antonio Carlos Jobim
Corcovado – Antonio Carlos Jobim/Elis Regina
Chovendo Na Roseira – Antonio Carlos Jobim/Elis Regina
Falando de Amor – Antonio Carlos Jobim/Miucha
Anos Dourados – Antonio Carlos Jobim/Chico Buarque
Agua de Beber – Antonio Carlos Jobim/Vinicius de Moraes
Fly Me To The Moon – Antonio Carlos Jobim/Frank Sinatra
O Samba De Amanhã – Antonio Carlos Jobim/Billy Blanco
Para la sesión de hoy quiero compartir con ustedes un programa que está relacionado a los hermanos. Esa relación tan poderosa, y en muchos casos tan influyente en nosotros. Esa relación de complicidad que muchas veces se cultiva de la más tierna infancia entre dos (o más) seres humanos que comparten la vida. En la música en general, y en el jazz en particular, la mayoría de las veces sucede que a pesar de tener una misma formación, una misma educación, un ambiente común, etc, uno de los hermanos trasciende más que los otros. En otros casos, los menos, ambos caminos tienen una trascendencia equilibrada, relativamente igual. Hablo de trascendencia, pero también podría usar la palabra éxito.
Something Different – The Mangione Brothers Sextet
If I Should Lose You – The Montgomery Brothers
Move To The Groove – The Heath Brothers
Swinging´At The Haven – Marsalis Family
Olvidar – Mike Metheny
Maninha – Tom Jobim/Chico Buarque/Miucha Buarque
Heyoke – The Brubeck Brothers Quartet
Autumn Leaves – Michel Petrucciani/Louis Petrucciani