Standards Cantados por Diferentes Generaciones

Como lo manifiesta Pedro B. Rey en el periódico La Nación, pocas cosas pueden jactarse de tener tantas vidas como los standards del jazz, esos temas que forman parte del inconsciente colectivo del jazz y permiten que los artistas del género los sigan interpretando, re-armonizando y replanteando sin pausa. Los standards pueden haber sido compuestos por maestros del propio ámbito del jazz, como Duke Ellington o Thelonious Monk, aunque los más auténticos son los que ya nadie recuerda bien de dónde surgieron, si de un musical de Broadway o de una vieja película de Hollywood.

En la actualidad los standards siguen siendo fuente de inspiración para los nuevos jazzistas, así como lo fueron para los grandes maestros del bebop, del cool o de cualquier época.

  • Strange Fruit – Billie Holiday
  • Strange Fruit – Kandace Springs
  • Autumn In New York – Frank Sinatra
  • Autumn In New York – Jose James
  • Exactly Like You – Abbey Lincoln
  • Exactly Like You – Alyssa Allgood
  • I Can’t Give You Anything But Love – Louis Armstrong
  • I Can’t Give You Anything But Love – Sachal Vasandani
  • That Old Feeling – Dinah Washington
  • That Old Feeling – Cyrille Aimee
  • I Fall In Love Too Easily – Chet Baker
  • I Fall In Love Too Easily – Matt Dusk
  • Fly Me To The Moon – Julie London/Gregory Porter
  • Don´t Explain – Herbie Hancock/Demian Rice/Lisa Hannigan
  • Love For Sale – Tony Bennett/Lady Gaga
  • Body And Soul – Tony Bennett/Amy Winehouse
  • They Can’t Take That Away From Me – Frank Sinatra/Natalie Cole
  • Unforgettable – Nat King Cole/Natalie Cole
  • Só Danço Samba – Eliane Elias/Randy Brecker/Amanda Brecker
  • Águas de Março – Maria Rita/Daniel Jobim
  • Samba Em Preludio – Melody Gardot/Phillipe Powell

Cien años de Crooners

En esta sesión de la quinta disminuida compartiré con ustedes un programa dedicado a unos personajes muy particulares de la música en general, que en nuestro caso, estarán circunscritos al ámbito del jazz. Unos personajes que han estado presentes casi desde los inicios del jazz. Tienen sus raíces en la radio comercial estadounidense de los años 1920 y 1930 y también en el jazz. Muchos opinan que tiene sus raíces en el bel canto de la ópera italiana. Los llamados Crooners.

El término crooner proviene del verbo inglés “to croon” que hace referencia a un cantar suave y de forma murmurante, sin proyectar la voz. Por ello, este término se aplica en general al cantante solista que explota estas características, y en particular a los intérpretes masculinos de canción popular estadounidense clásica. Un crooner suele poseer una voz grave y, generalmente, se hace acompañar por una orquesta o una Big Band. Originalmente se aplicaba de forma peyorativa, lo que supuso que muchos cantantes considerados como tales renegaran del término. Este fue el caso de Frank Sinatra, quien declaró que no creía que él o Bing Crosby fueran crooners.

Para la sesión de hoy he seleccionado a veinte crooners, coloquialmente, diez de los cuales son viejos y los otros diez nuevos crooners. De los primeros que escucharemos en la primera hora de la sesión, todos han muerto excepto uno de ellos. En la segunda hora, los diez que escucharemos están vivos, el mayor de ellos tiene cincuenta y ocho años y el más joven cuarenta y uno. Por eso lo de viejos y jóvenes, está enmarcado en un concepto absolutamente relativo. Lo cierto es que el crooning, ese cantar o hablar con voz dulce, baja y llena de emoción, esta presente en la música en general y en el jazz en particular desde hace casi un siglo. Ya lo comprobaremos en este viaje cronológico de la quinta disminuida.

  • Day-In Day-Out – Frank Sinatra
  • Young At Heart – Bing Crosby
  • Misty – Billy Eckstine
  • These Foolish Things (Remind me of You) – Nat King Cole
  • I Just Dropped By To Say Hello – Johnny Hartman
  • Ev’ry Time We Say Goodbye – Jackie Paris
  • Lucie – Charles Aznavour
  • L’espérance en l’homme – Claude Nougaro
  • Lullaby Of Birdland – Mel Tormé
  • The Way You Look Tonight – Tony Bennet
  • They Can’t Take That Away From Me – Seal
  • You’d Be So Nice to Come Home To – Harry Conick Jr.
  • My One and Only Love – Kurt Elling
  • On A Clear Day – Mario Biondi
  • L.O.V.E. – Gregory Porter
  • I Can’t Be Bothered – Hugh Coltman
  • Come Fly With Me – Michael Bubble
  • What A Little Moonlight Can Do – Jose James
  • The Best is Yet To Come – Matt Dusk
  • Just One Of Those Things – Jamie Cullum
  • Angel Eyes – Frank Sinatra

La larga noche de Chet Baker

James Gavin

Había varios entierros en las onduladas colinas del cementerio de Inglewood Park, en un barrio residencial para negros en las afueras de Los Ángeles. Unos toldos blancos protegían del sol a los asistentes, pero no podían cortar el paso al rugido de los aviones que aterrizaban y despegaban en el cercano aeropuerto internacional de Los Ángeles. En todo el cementerio el mal olor de los tubos de escape de los reactores tapaba el aroma del césped recién cortado.

Dos días antes, un vuelo de pasajeros procedente de Holanda había traído el cuerpo ya descompuesto de un trompetista al que se recordaba como uno de los hombres más atractivos de los años cincuenta. Chet Baker había fallecido en Amsterdam el viernes 13 de mayo de 1988 en circunstancias misteriosas relacionadas con drogas. La larga noche de Chet Baker había llegado a su fin, cuando una placida tarde de primavera se había presentado en el pequeño vestíbulo del Hotel Prins Hendrik para registrarse. Baker se instaló en una pulcra habitación con paredes amarillas, una cama de matrimonio, una mesita de noche y un televisor. Las dos ventanas, que por abajo llegaban al nivel de las rodillas, daban a una maraña de calles tortuosas rodeadas de hoteles y restaurantes. Los tranvías pasaban veloces, y los timbrazos de las bicicletas se oían por todas partes. Baker cerró la puerta al entrar, se quedó escondido aproximadamente hasta las tres y diez de la madrugada del viernes 13 de mayo, a esa hora, un hombre que salía de un bar vio un cuerpo enroscado en posición fetal que yacía inerte bajo la luna llena. La policía holandesa había retirado el cadáver para depositarlo en la morgue, suponiendo que habían encontrado un drogadicto más que había tenido mala suerte. Al día siguiente, Peter Huijts, el Road Mananger holandés de Baker, identificó el cadáver. La muerte se atribuyó a suicidio o accidente causado por la droga. Pero abundaban las evidencias contradictorias, la ventana de la habitación del hotel solo se abría unos treinta centímetros, lo que hacía imposible que hubiera caído involuntariamente, había parafernalia de drogadicto por toda la habitación, y sin embargo un portavoz de la policía declaró que en la sangre de Baker no se habían encontrado rastros de heroína. Durante los meses anteriores, el trompetista había dicho a varias personas que alguien iba por él. Chet Baker, nacido en una granja de Oklahoma, había llenado de fantasías la cabeza de la gente desde el día en que nació. Todo en él estaba abierto a la especulación: su toque cool de trompeta, tan vulnerable pero tan distanciado; su enigmática media sonrisa; la androginia de su dulce voz al cantar; un rostro que era a la vez infantil y siniestro. La melodía que surgía de su instrumento creaba una música que era uno de los lamentos más hermosos del siglo XX.

  • I Get Along Without You Very Well – Chet Baker 1954
  • I Get Along Without You Very Well – Chet Baker 1988
  • I Fall In Love Too Easily – Chet Baker 1954
  • I Fall In Love Too Easily – Chet Baker 1988
  • The Thrill Is Gone – Chet Baker – 1954
  • The Thrill Is Gone – Chet Baker/Enrico Pieranunzi 1988
  • Look for the Silver Lining – Chet Baker 1954
  • Look for the Silver Lining – Chet Baker 1988
  • I´m a Fool To Want You – Chet Baker 1986
  • That Old Feeling – Eliane Elias
  • La chanson D’Hélène – Stephane Belmondo
  • My Funny Valentine – Matt Dusk
  • Paradox – Richie Beirach
  • Let’s Get Lost – Cyrille Aimee
  • Donna – Bollani/Fresu/Gatto/Pietropaoli/Rava
  • Up Chet’s Alley – Dave Liebman/Phil Markowitz
  • Chet Lives – Joe Barbieri
  • My Funny Valentine – Chet Baker